Una isla como ninguna otra

Sentir amor a primera vista por Nusa Penida es fácil; lo difícil será decidir si nos gusta más bajo el agua o en superficie. Sus icónicos acantilados y playas escondidas, como Kelingking Beach y Atuh Beach, ofrecen vistas impresionantes y escenarios naturales casi intactos.

Además, su cultura local sigue siendo auténtica, con templos místicos como Goa Giri Putri y tradiciones arraigadas. Aquí pervive el Bali de hace treinta años. En la tradición espiritual balinesa, se cree que Nusa Penida es el hogar de poderosos espíritus y deidades. La isla suele asociarse con la transformación, la protección y el equilibrio entre las fuerzas de la luz y la oscuridad.

Los locales creen que la isla posee una energía protectora, centrada especialmente en el templo Pura Dalem Penataran Ped, que desempeña un papel vital en las ceremonias religiosas para alejar el mal y mantener la armonía. Para buceadores y viajeros, estar en las aguas que rodean Nusa Penida puede convertirse en una experiencia espiritual: sumergirse en una naturaleza tan pura e intacta crea una profunda conexión. El medioambiente se convierte en parte de uno.

 Por su biodiversidad, Penida forma parte de un área marina protegida que alberga más de 300 especies de coral y 500 de peces de arrecife. Es famosa por ser uno de los mejores lugares del mundo para avistar mantarrayas, en Manta Point, y el enigmático pez luna (Mola Mola), en Crystal Bay. Los sanos arrecifes de nuestra isla destacan dentro de Triángulo de Coral, una de las regiones con mayor biodiversidad marina del planeta. Y las corrientes legendarias de algunos sitios, atraen tanto a buceadores experimentados en busca de encuentros inolvidables y emociones fuertes.